Habrás llegado a ser…

Cuando ignores que existe las palabras ira, odio, rencor y guerra. 
Cuando hayas querido y quieras a tus padres como deseas que contigo lo hagan tus hijos. 
Cuando sepas equilibrar las razones de tu vivir en beneficio propio y de los tuyos, sin perjudicar a otros. 
Cuando el ser honesto, humilde, y tolerante lo seas sin que para serlo tengas que hacer esfuerzo alguno. 
Cuando llegues a tener lo que precisas y alegre compartas la mitad con quien aún más que tú lo necesita. 
Cuando consideres que lo que racionalmente tienes de ecuánime, inteligente y moral es de mayor importancia que la belleza física que adorne tu persona. 
Cuando con valor y fe defiendas tus ideales, si estás seguro de contribuir con ello al mejor vivir de tus semejantes. 
Cuando respetes las ideas y criterios ajenos que no compartes. 
Cuando apartes de ti motivaciones corruptivas, demagogias confusas y todo tipo de ambiciones. 
Cuando ganes con naturalidad y sepas perder con dignidad. 
Cuando antepongas la valoración humana y la amistad sincera a las coyunturas materiales de la vida. 
Cuando te adaptes a las circunstancias, lugares y momentos con absoluta naturalidad. 
Cuando no te vanaglories ni pretendas deslumbrar con tu propia personalidad. Cuando no seas absolutista respecto a tu religión, pensando que es la mejor. Cuando teniendo fe en ella, apartas la superstición y te queda lo constructivo de su doctrina, valorándola y practicándola según te dicte la conciencia. 
Cuando des cumplimiento a tus promesas y no prometas lo que no esté de poder cumplir. 
Cuándo llenes el corazón con la palabra Amor 
Habrás llegado a Ser.
 

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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¿Qué es tener éxito?

· Es comenzar por tener un sueño.
                        · Es estar comprometido con tus sueños.
                        · Es tener confianza en ti mismo.
                        · Es algo que no aparece por casualidad.
                        · Es aceptar lo que no se puede cambiar.
                        · Es saber cambiar a tiempo.
                        · Es saber que lo único permanente es el cambio.
                        · Es saber y poder delegar en los demás parte de tu tarea.
                        · Es volver a empezar.
                        · Es reconocerte en tus logros y saber disfrutarlos.
                        · Es reconocer que te equivocaste y pedir perdón.
· Es reconocer que detrás de cada acierto,
puede haber varios fracasos.
                        · Es enamorarte de lo que haces.
                        · Es no postergar y hacer algo ahora.
                        · Es darse cuenta que estás eligiendo a cada momento.
                        · Es reconocer tus propias debilidades y fortalezas.
                        · Es no parar jamás hasta conseguir tus sueños.
                        · Es saber con qué fin hacemos las cosas.
                        · Es no mirar hacia atrás.
                        · Es actuar con entusiasmo.
                        · Es transitar caminos desconocidos.
                        · Es probar hacer algo que nunca hicimos.
                        · Es saber que no estamos solos.
                        · Es no rendirse jamás.
                        · Es disfrutar de cada momento.
                        · Es tener tiempo libre y saber disfrutarlo.
                        · Es pensar en positivo.
                        · Es tener metas claras.
                        · Es tener perseverancia en la búsqueda de los sueños.
                        · Es estar preparado para ver la oportunidad.
                        · Es tener una actitud positiva.
                        · Es desarrollar la creatividad.
                        · Es utilizar la imaginación.
                        · Es volver a comenzar con el mismo entusiasmo,
                        sin darse por vencido.
                        · Es hacer las cosas lo mejor posible, pero hacerlas.
                        · Es actuar como si ya hubieras logrado tus metas.
                        · Es tener claridad en el propósito.
                        · Es no hacerse problema por las cosas pequeñas.
                        · Es dejar una huella para que otro pueda seguir.
                        · Es jugar a ganar por disfrutar.
                        · Es tener conciencia de lo que uno quiere.
                        · Es arriesgar.
 
                        Envió:  Yali  ( 2001 )
 

Extraído del portal Católico www.encuentra .com ( 2001 )

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Arriesgarse

Reír, es arriesgarse a parecer un tonto.

Llorar es arriesgarse a parecer un sentimental.

Hacer algo por alguien, es arriesgarse a involucrarse.

Expresar sentimientos, es arriesgarse a mostrar tu verdadero yo.

Exponer tus ideas y tus sueños, es arriesgarse a perderlos.

Amar, es arriesgarse a no ser correspondido.

Vivir, es arriesgarse a morir.

Esperar, es arriesgarse a la desesperanza.

Lanzarte, es arriesgarse a fallar.

Pero los riesgos deben ser tomados,

porque el peligro más grande en la vida es no arriesgarse.

La persona que no arriesga, no hace, ni tiene nada.

Se pueden evitar sufrimientos y preocupaciones, pero simplemente

no se puede aprender, sentir, cambiar, crecer, amar y vivir …

Sólo una persona que se arriesga es libre.

Colaboración de Esperanza de la Garza ( 2001 )

Extraído del portal Católico www.encuentra .com ( 2001 )

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Cree en ti

Creo que todos tenemos adentro una brújula que nos conduce adonde anhelamos.

No olvides confiar en tu brújula, consúltala a menudo, porque el conocer su presencia te dará fortaleza para lo que la vida te depare.

No permitas que te desvíen. Pídele la verdad a tu corazón, y te dará la respuesta y el discernimiento para tomar las decisiones que son para ti. Ama a todos, y no esperes agradecimientos.

Haz lo mejor que puedas. Vive cada día en su plenitud. Nadie puede leer el futuro.

Recuerda: para todas tus preguntas, allá en tu fuero interno, a la vera del camino, habrá respuestas más claras, soluciones aceptables. Hace falta paciencia y confianza para alcanzar la meta, solucionar problemas, y realizar sueños.

Aunque por momentos parezca que ya no puedes seguir, conoce tu fortaleza, y sabrás sobrellevar todo lo que la vida te depare. CREE EN TI.

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

Este texto nos recuerda que contamos con una ayuda fundamental, amorosa, leal y eterna dentro nuestro, que si le prestamos atención se convierte en nuestra brújula.

En momentos de crisis como la actual, que parece debilitar o derrumbar nuestra confianza en la humanidad, en nuestro gobierno y hasta en nosotros mismos, recordar la existencia de nuestra voz interior y recurrir a ella, al Espíritu Santo que llevamos dentro, nos abre una puerta a la Esperanza, al Amor, a la Fe y a la confianza en nosotros mismos.

Dios se nos ofrece en nuestro corazón, tengámoslo presente. Nuestra vida puede cambiar y mejorar si lo buscamos decididamente.

Con amor, Javier Serrano ( 2001 )

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Buscar lo mejor

Somos lo que elegimos, lo que optamos. Dios no impone nada, solamente ofrece, dejando al hombre la libertad de decidir. Muchos prefieren las joyas, los coches, los caminos fáciles. Hay sendas para los más variados deseos, pero hay cosas que la herrumbre no corroe. Son los ideales nobles, el bien, la fraternidad, la alegría, el evangelio.

¿ Por qué será tan difícil preferir la paz en lugar de la guerra; el amor, en lugar del odio; la generosidad, en lugar del egoísmo; la acción, en lugar de la comodidad; la confianza, en lugar del orgullo; el perdón, en lugar de la envidia; el desprendimiento y la pobreza, en lugar de la satisfacción; el corazón de niño, en lugar de la vanidad ?

¿ Por qué será tan difícil elegir al Creador en lugar de la criatura; el sacrificio, la renuncia, lo correcto, lo humano, el deber, en lugar del placer ?

¡Ojalá que todos sepan optar : los padres, las madres, los jóvenes, los niños!

En todo momento debemos decidir. Podemos siempre escoger las cosas mejores: la luz, en lugar de las tinieblas; la comunión de vida, en lugar de la soledad; la unión, en lugar de las separaciones; la verdad, en lugar de la mentira; Dios, los hombres y la familia, en lugar de la evasión y de la irresponsabilidad.

Para ser feliz, decídete por lo verdadero, lo justo, lo difícil.

Felicidad es sinónimo de sacrificio, de renuncia, de abnegación. En todo tiempo lleva a tus hermanos a vivir la fraternidad.

El mundo necesita de fraternidad, la que depende de ti y de tus elecciones. Trata con amabilidad a todos.

El pasajero que viaja a tu lado no es tu enemigo ni tu competidor. Es un hermano a quien debes tratar con amabilidad.

No rezongues con el fin de desahogarte. Busca consolar, más que ser consolado. Y, aunque sea sin darte cuenta, serán recompensadas las benevolencias de tu corazón.

Nunca es tarde para hacer el bien, para ser hermano, para decir “cuenta conmigo”.

La decisión es tuya. Piensa y resuélvete siempre para lo mejor.

“Momentos de Paz” – Ana María Zacagnino ( 2001 )

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Amor, bienestar y éxito

Una mujer salió de su casa y vio tres viejos con una larga y blanca barba sentados en el jardín. Ella no los conocía. Les dijo: – «No los conozco, pero deben estar hambrientos. Por favor pasen adelante y coman algo».

– ¿»Está el hombre de la casa ?», preguntaron a la mujer.

– «No», dijo ella, «está fuera» – «Entonces no podemos entrar», replicaron ellos.

En la tarde, cuando el marido regresó, la mujer le contó lo que había sucedido.

– «Ve entonces afuera y diles que ya estoy en casa e invítalos a pasar».

La mujer salió e invitó a los viejos a entrar.

– «Nosotros no entramos a una casa juntos», replicaron ellos.

– «¿Porqué?»,- la mujer quiso saber la razón. Uno de los viejos explicó:

– » Su nombre es Bienestar» señalando a uno de sus amigos; señalando al otro,»El es el Éxito», y yo soy el Amor». Luego añadió: «Ve a tu casa y discute con tu esposo cual de nosotros ustedes quieren que entre a su casa».

La mujer entró a su casa y le contó a su esposo lo que los viejos habían dicho. El esposo estaba muy contento.»Qué agradable», dijo.»Siendo así invitemos a Bienestar, dejémoslo entrar y que llene nuestro hogar con bienestar !»

La esposa no estuvo de acuerdo. «Querido, porqué no invitamos a Éxito ?» La hija de ambos estaba escuchando e hizo su propia sugerencia: «¿ No sería mejor invitar al Amor ? nuestra casa estaría llena de amor !»

(piensa en este punto a quién invitarías tú, antes de proseguir la lectura).

«Escuchemos el consejo de nuestra hija», dijo el esposo a la esposa.

«Ve e invita a Amor para que sea nuestro huésped»

La mujer salió y preguntó a los tres viejos:

– «¿Cuál de ustedes es Amor ?, por favor entra y sé nuestro huésped.»

Amor se levantó y comenzó a caminar hacia la casa. Los otros dos también se levantaron y lo siguieron.

La mujer, sorprendida, le preguntó a Bienestar y Éxito: – «Yo sólo invité a Amor, ¿ porqué están entrando ustedes?» Los tres viejos respondieron a la vez:

– «Si hubiesen invitado al Bienestar o al Éxito, los otros dos hubiésemos permanecido fuera, pero como ustedes invitaron al Amor, a cualquier lugar que él vaya, los otros vamos con él.

En cualquier lugar que haya Amor, hay también Bienestar y Éxito !!!!!

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Amar a un ser humano

Amar a un ser humano es aceptar la oportunidad de conocerlo verdaderamente y disfrutar de la aventura de explorar y descubrir lo que guarda más allá de sus máscaras y sus defensas. Contemplar con ternura sus más profundos sentimientos, sus temores, sus carencias, sus esperanzas y alegrías, su dolor y sus anhelos.

Es comprender que detrás de su careta y su coraza, se encuentra un corazón sensible y solitario, hambriento de una mano amiga, sediento de una sonrisa sincera en la que pueda sentirse en casa.

Es reconocer, con respetuosa compasión, que la desarmonía y el caos en los que a veces vive son el producto de su ignorancia y su inconciencia, y darte cuenta de que si genera desdichas es porque aún no ha aprendido a sembrar alegrías, y en ocasiones se siente tan vacío y carente de sentido, que no puede confiar ni siquiera en sí mismo.

Es descubrir y honrar, por encima de cualquier apariencia, su verdadera identidad, y apreciar honestamente su infinita grandeza como una expresión única e irrepetible de la vida.

Amar a un ser humano es brindarle la oportunidad de ser escuchado con profunda atención, interés y respeto; aceptar su experiencia sin pretender modificarla sino comprenderla.

Ofrecerle un espacio en el que pueda descubrirse sin miedo a ser calificado, en el que sienta la confianza de abrirse sin ser forzado a revelar aquello que considera privado; es reconocer y mostrar que tiene el derecho inalienable de elegir su propio camino, aunque éste no coincida con el tuyo.

Es permitirle descubrir su verdad interior por sí mismo, a su manera: apreciarlo sin condiciones, sin juzgarlo ni reprobarlo, sin pedirle que se amolde a tus ideales, sin exigirle que actúe de acuerdo con tus expectativas.

Es valorarlo por ser quien es, no por como tú desearías que fuera; es confiar en su capacidad de aprender de sus errores y de levantarse de sus caídas más fuerte y más maduro, y comunicarle tu fe y confianza en su poder como ser humano.

Amar a un ser humano es atreverte a mostrarte indefenso, sin poses ni caretas, revelando tu verdad desnuda, honesta y transparente. Es descubrir frente al otro tus propios sentimientos, tus áreas vulnerables; permitirle que conozca al ser que verdaderamente eres, sin adoptar actitudes prefabricadas para causar una impresión favorable.

Es exponer tus deseos y necesidades, sin esperar que se haga responsable de saciarlas; es expresar tus ideas sin pretender convencerlo de que son correctas; es disfrutar del privilegio de ser tú mismo frente al otro, sin pedirle reconocimiento alguno, y en esta forma, irte encontrando a ti mismo en facetas siempre nuevas y distintas.

Es ser veraz, y sin miedo ni vergüenza, decirle con la mirada cristalina, «este soy, en este momento de mi vida, y esto que soy con gusto y libremente, contigo lo comparto… si tú quieres recibirlo».

Amar a un ser humano es disfrutar de la fortuna de poder comprometerte voluntariamente y responder en forma activa a su necesidad de desarrollo personal.

Es creer en él cuando duda de sí mismo, contagiarle tu vitalidad y tu entusiasmo cuando está por darse por vencido, apoyarlo cuando flaquea, animarlo cuando titubea, tomarlo de las manos con firmeza cuando se siente débil, confiar en él cuando algo lo agobia y acariciarlo con dulzura cuando algo lo entristece, sin dejarte arrastrar por su desdicha.

Es compartir en el presente por el simple gusto de estar juntos, sin ataduras ni obligaciones impuestas, por la espontánea decisión de responderle libremente.

Amar a un ser humano es ser suficientemente humilde como para recibir su ternura y su cariño sin representar el papel del que nada necesita.

Es aceptar con gusto lo que te brinda sin exigir que te dé lo que no puede o no desea; es agradecerle a la vida el prodigio de su existencia y sentir en su presencia una auténtica bendición en tu sendero.

Es disfrutar de la experiencia sabiendo que cada día es una aventura incierta y el mañana, una incógnita perenne; es vivir cada instante como si fuese el último que puedes compartir con el otro, de tal manera que cada reencuentro sea tan intenso y tan profundo como si fuese la primera vez que lo tomas de la mano, haciendo que lo cotidiano sea siempre una creación distinta y milagrosa.

Amar a un ser humano es atreverte a expresar el cariño espontáneamente a través de tu mirada, de tus gestos y sonrisas; de la caricia firme y delicada, de tu abrazo vigoroso, de tus besos, con palabras francas y sencillas; es hacerle saber y sentir cuánto lo valoras por ser quien es, cuánto aprecias sus riquezas interiores, aún aquellas que él mismo desconoce.

Es ver su potencial latente y colaborar para que florezca la semilla que se encuentra dormida en su interior; es hacerle sentir que su desarrollo personal te importa honestamente, que cuenta contigo.

Es permitirle descubrir sus capacidades creativas y alentar su posibilidad de dar todo el fruto que podría; es develar ante sus ojos el tesoro que lleva dentro y cooperar de mutuo acuerdo para hacer de esta vida una experiencia más rica y más llena de sentido.

Amar a un ser humano es también atreverte a establecer tus propios limites y mantenerlos firmemente; es respetarte a ti mismo y no permitir que el otro transgreda aquellos que consideras tus derechos personales.

Es tener tanta confianza en ti mismo y en el otro, que sin temor a que la relación se perjudique, te sientas en libertad de expresar tu enojo sin ofender al ser querido, y puedas manifestar lo que te molesta e incomoda sin intentar herirlo o lastimarlo.

Es reconocer y respetar sus limitaciones y verlo con aprecio sin idealizarlo; es compartir y disfrutar de los acuerdos y aceptar los desacuerdos, y si llegase un día en el que evidentemente los caminos divergieran sin remedio, amar es ser capaz de despedirte en paz y en armonía, de tal manera que ambos se recuerden con gratitud por los tesoros compartidos.

Amar a un ser humano es ir más allá de su individualidad como persona; es percibirlo y valorarlo como una muestra de la humanidad entera, como una expresión del hombre, como una manifestación palpable de esa esencia trascendente e intangible llamada «ser humano», de la cual tú formas parte.

Es reconocer, a través de él, el milagro indescriptible de la naturaleza humana, que es tu propia naturaleza, con toda su grandeza y sus limitaciones; apreciar tanto las facetas luminosas y radiantes de la humanidad, como sus lados oscuros y sombríos.

Amar a un ser humano, en realidad, es amar al ser humano en su totalidad; es amar la auténtica naturaleza humana, tal como es, y por tanto, es amarte a ti mismo y sentirte orgulloso de ser una nota en la sinfonía de este mundo.

Autor desconocido

 

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Resucitarán para ti

Tus muertos resucitarán “para ti”, cuando hayas aceptado que “murieron para ti”; sólo los recuperas en su regreso, cuando aceptaste su partida.

¡No es posible la alegría del reencuentro, sin sufrir el dolor de la despedida!

No te mueras con tus muertos;

¡llora la siembra de ayer con la esperanza puesta en la cosecha de mañana!

Acepta que la muerte de tus seres queridos te despierta mucha rabia, aunque no sepas por qué y aunque no quieras sentirla.

Tu resistencia ante la muerte te hace rebelarte, aunque no sepas del todo contra quién hacerlo…¿Contra Dios…? ¿Contra tus muertos…porque te abandonaron? ¿Contra…?

No te mueras con tus muertos; ¡déjalos dormir su tiempo como duerme la oruga en la crisálida, esperando la primavera para hacerse mariposa!

Dios no es menos Dios, más justo o más injusto, más bueno o más malo, cuando naces que cuando mueres. O crees en Él siempre, o no crees nunca; pero una cosa es creer en Él y otra es creer en tus explicaciones.

¡Ante la muerte se acaban tus explicaciones!

No te tortures sintiéndote culpable ante tus muertos. ¡Los muertos no cobran deudas! ¡Además, si hoy resucitaran, volverías a ser con ellos como fuiste! ¿O no sabías con certeza que un día iban a morir?

No te mueras con tus muertos; ¡muéstrales más bien, que como el árbol podado en el invierno, lejos de morirte, retoñas vistiendo tu desnudez, devolviendo frutos por heridas!

Acepta y date cuenta, de que tus muertos te plantean un serio desafío : el de tener una respuesta para el sentido de tu vida. Porque mientras no sabes para qué murieron ellos, tampoco sabes para qué vives tú. ¿O no piensas morir?

 

…la vida y la esperanza

Ante tus muertos queridos tu corazón tiene mil interrogantes y tu razón, ninguna respuesta. Resolverás mejor la cosa, cuando preguntes menos y aceptes más.

Las flores que regalas a tus muertos hablan de la vida y la esperanza. También en tu corazón duermen la vida y la esperanza, esperando que tú las despiertes para seguir viviendo esperanzado.

No te mueras con tus muertos;

¡míralos marchar por su camino, hacia su meta, y aprende la lección que ellos te dejan, diciendo que tu andar de peregrino, también tiene un final, al que te acercas…!

Más que con la frialdad de los mármoles, más que con suntuosos monumentos y grandilocuentes discursos, honra a tus muertos con una vida digna. ¡Piensa qué esperas para ti cuando hayas muerto!

Aprende de tus muertos una lección para la vida : es mejor amar a los tuyos mientras viven, que quitarte culpas por no haberlos amado, cuando ya se fueron.

No te mueras con tus muertos;

¡despídelos, como despides las aguas del río que van al mar, sabiendo que volverán mañana nubes, y serán lluvias sobre tu rostro!

Así como los cirios encendidos se queman y derriten dando luz y calor en la despedida de tus muertos, que tu corazón no se derrita en vano, quemándose en el fuego del dolor sino que arda en las llamas del amor y en la luz de la esperanza.

No te mueras con tus muertos;

¡vive este invierno de dolor, que te desnuda como quitándote la vida; pero, recuerda que la savia duerme para retoñar y florecer en primavera!

Parte del dolor que te golpea, cuando despides a tus muertos, se debe a una pregunta que golpea en tu interior, interrogando por el sentido de la vida.

Si respondes de verdad, sincera y frontalmente, gracias a la muerte de tus muertos tú vivirás más plena y auténticamente.

 

 

Extraído del libro No te mueras con tus muertos

de René Juan Trossero – Editorial Bonum

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Ser madre

Es aprender a hacer todo con una sola mano. Es comer tanto puré de zapallo y zanahoria como una nunca comió en su vida. O despertarse sobresaltada el domingo de mañana, mirar el reloj e intentar levantarse a toda velocidad para llevar a los niños a la escuela, sin darse cuenta de que es un día feriado.

Ser madre es dormir con un solo ojo hasta escuchar el sonido de la llave de la puerta que anuncia que el hijo adolescente está de vuelta en casa. Y adjudicarse la porción de torta más desarmada y el huevo frito que peor salió. Usar el buzo que la princesa de la casa desechó por pasado de moda. Y reciclar el tapado de hace años para poder renovar las camperas de los pequeños.

Ser madre es aprender otra vez la regla de tres y la acentuación de las palabras graves. Volver a armar rompecabezas y conocer de memoria a todos los héroes de los dibujitos. Es planchar, freír milanesas y resolver cuentas de dividir, todo al mismo tiempo. Ser madre es darse el gustazo de recibir el primer beso con babas que aprendió a dar el bebé. Correr junto a un hijo hasta quedar exhausta porque está aprendiendo a andar en bicicleta sin rueditas. Y reservar el placer de verlo dormir como un oso. Ser madre es intentar tejer por primera vez para hacer una batita amarillo patito. Y conocer a los hijos tanto hasta adivinar lo que piensan.

SER MADRE ES…..

SABER QUE UNA NUNCA MÁS ESTARÁ SOLA.

 

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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La creación de una madre

Dios estaba muy ocupado en crear a las madres, llevaba ya seis días trabajando extraordinariamente cuando un ángel se le presentó y le dijo:

-Te afanas demasiado Señor. Y el señor repuso: -«¿Acaso no has leído las especificaciones que debe llenar este pedido???

Esta criatura tiene que ser lavable de pies a cabeza, pero sin ser de plástico; llevar 180 piezas movibles, todas reemplazables; funcionar a base de café negro y de las sobras de comida… poseer un regazo que desaparezca cuando se ponga de pie; un beso capaz de curarlo todo, desde una pierna rota hasta un amor frustrado….y seis pares de manos».

El ángel confundido preguntó:-¿Seis pares de manos?, ¡Eso no es posible!

-No son las manos el problema,-agrego el Señor- Sino los tres pares de ojos.

¿Y eso para el modelo normal?-inquirió el ángel.

El Señor insistió: -Uno para ver a través de la puerta cada vez que pregunte: ¿Niños que andan haciendo?, aunque ya lo sepa muy bien. Otro detrás de la cabeza para ver lo que mas le valiera ignorar, pero precisa saber. Y desde luego, los de adelante para mirar a un niño en apuros y decirle, sin pronunciar siquiera una palabra: «Ya entiendo hijo y te quiero mucho».

El ángel le tiró de la manga y le advirtió mansamente: Mas vale que te vayas a la cama Señor, mañana será otro día…

No puedo, además me falta poco. Ya hice una que se cura por sí sola cuando se enferma, que es capaz de alimentar a una familia de seis con medio kilo de carne molida y de persuadir a un niño que esté quieto bajo la ducha.

Lentamente el ángel dio la vuelta en torno a los modelos maternales: -Me parece demasiado delicado , comento con un suspiro.

-Pero es muy resistente aseguró Dios emocionado -No tienes idea de lo que es capaz de hacer y sobrellevar.

 

-¿Podrá pensar?. -¡Claro!. Y razonar y transigir.

Por último el ángel se inclinó y pasó una mano por la mejilla del modelo. -¡Tiene una fuga!.

-No, no es una fuga, es una lágrima.

-¿Y para que sirve?.

Para expresar gozo, felicidad, aflicción, desengaño, soledad y orgullo.

-Eres un genio Señor- dijo el ángel.

Y Dios con un perfil de tristeza observó: – ¡Yo no la puse!

 

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Día de la madre

“…hoy es un día muy especial para todos aquellos que hemos recordado a nuestra madre. Nosotros lo hicimos con una oración y con mucha alegría en nuestro corazón ya que sabemos que desde el lugar donde se encuentre nos ayudará a resolver los problemas cotidianos.

Cuando estaba físicamente conmigo siempre le decía : “ yo tengo dos madres, tú eres la que me distes la vida, y mi otra MADRE es la mamá espiritual que me acompaña siempre.”

Si bien la presencia física es importante, les aseguro para todos aquellos que hoy no la tienen, que no sólo derramen lágrimas de tristeza. Para poder aceptar éstas pérdidas es saludable y beneficioso ofrecer nuestra pena a nuestra madre espiritual, para que ella con su gran sabiduría la transforme en amor y aceptación por lo que estamos pasando y así el camino será menos dificultoso hasta que la volvamos a encontrar. Que así sea .”

 

Atte. Maria Inés

Colaboración de María Inés Pérez ( 2001 )

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Mamá

«Me dicen que me vas a enviar mañana a la Tierra; pero, ¿cómo viviré tan
pequeño e indefenso como soy?»

«Entre muchos ángeles escogí uno para ti, que te está esperando: él te cuidará»

«Pero, dime, aquí en el cielo no hago más que cantar y sonreír, y eso basta para ser feliz»

«Tu ángel te cantará, te sonreirá todos los días, y tú sentirás su amor y
serás feliz»

«¿Y cómo entender lo que la gente me hable?, si no conozco el extraño idioma que hablan los hombres»

«Tu ángel te dirá las palabras más dulces, y más tiernas que puedas escuchar, y con mucha paciencia y cariño te enseñará a hablar».

«Y ¿qué haré cuando quiera hablar contigo»

«Tu ángel te juntará las manitos y te enseñará a orar»

«He oído que en la tierra hay hombres malos, ¿quién me defenderá?

«Tu ángel te defenderá, aún a costa de su propia vida»

«Pero estaré siempre triste porque no te veré más, Señor»

«Tú ángel te hablará de Mí, y te enseñará el camino para que regreses a mi
presencia, aunque Yo siempre estaré a tu lado»

En ese instante, una gran paz reinaba en el cielo, pero ya se oían voces terrestres, y el niño presuroso murmuró suavemente: «Dios mío, si ya me voy, dime su nombre.¿Cómo se llama mi ángel?

«Su nombre no importa, tú le dirás MAMÁ».

¡¡¡FELIZ DIA!!!

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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A orillas del río PIEDRA II

A veces nos invade una sensación de tristeza que no logramos controlar. Percibimos que el instante mágico de aquel día pasó, y que nada hicimos. Entonces la vida esconde su magia y su arte.

Tenemos que escuchar al niño que fuimos un día, y que todavía existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de momentos mágicos. Podemos reprimir su llanto, pero no podemos acallar su voz.

Ese niño que fuimos un día continúa presente. Bienaventurados los pequeños, porque de ellos es el Reino de los Cielos.

Si no nacemos de nuevo, si no volvemos a mirar la vida con la inocencia y el entusiasmo de la infancia, no tiene sentido seguir viviendo.

Existen muchas maneras de suicidarse. Los que tratan de matar el cuerpo ofenden la ley de Dios. Los que tratan de matar el alma también ofenden la ley de Dios, aunque su crimen sea menos visible a los ojos del hombre.

Prestemos atención a lo que nos dice el niño que tenemos guardado en el pecho. No nos avergoncemos por causa de él. No dejemos que sufra miedo, porque está solo y casi nunca se le escucha.

Permitamos que tome un poco las riendas de nuestra existencia. Ese niño sabe que un día es diferente a otro.

Hagamos que se vuelva a sentir amado. Hagamos que se sienta bien, aunque eso signifique obrar de una manera a la que no estamos acostumbrados, aunque parezca estupidez a los ojos de los demás.

Recuerden que la sabiduría de los hombres es locura ante Dios. Si escuchamos al niño que tenemos en el alma, nuestros ojos volverán a brillar.

Si no perdemos el contacto con ese niño, no perderemos el contacto con la vida…

Paulo Coelho

 

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Sembrar

Siempre es mejor construir que destruir. Y sembrar es construir para el día de mañana, para recoger más adelante.

Siembra tu fe, para sostener y apoyar a los que vacilan. Siembra tu abnegación y no la reserves solamente para ti. Siembra tu confianza y Dios no te dejará ni los hombres te fallarán.

Siembra la sonrisa a tu alrededor; la sonrisa hace bien y te hace bien, la sonrisa disipa nubes y suaviza tiranteces.

Siembra tu dulzura y llegarás a conquistar a los hombres, aún a aquellos que tienden a la violencia o a no saber dominarse.

Siembra tu amistad, tu gozo y tu entusiasmo en todos aquellos que lo necesitan, pues así llegarás a hacer felices a los demás y ellos te harán feliz a ti.

Siembra tus sacrificios, aún con lágrimas y sin alarde; todo sacrificio requiere una cuota de dolor y de sangre; pero toda sangre es redentora y toda lágrima es purificadora.

Siembra toda tu vida; que toda tu vida sea una verdadera siembra de alegría, de bondad, de paz y de amor; el que siembra luz, recogerá calor; en cambio, el que siembra vientos, recogerá tempestades.

Colaboración de Cristina Minolli ( 2001 )

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Reflejo de nuestras Actitudes

Sentados en el pórtico de una destartalado granja, un joven y su abuelo vieron venir un automóvil por el rara vez transitado camino rural.

El ocasional conductor se detuvo a preguntar la dirección para llegar a un pueblo vecino. Después de recibir las indicaciones respectivos, regresó a su auto. Había dado sólo unos cuantos pasos, cuando titubeó e hizo una pregunta torpe al anciano: – Dígame señor, ¿Cómo son los personas de por aquí?-. – ¿Por qué lo pregunta?- respondió el abuelo. Acercándose unos pasos, el forastero dijo: – Me estoy mudando de un pueblo donde las personas eran muy mezquinas. Nunca había estado con gente tan amargado en mi vida. Viví en ese pueblo durante más de un año y jamás me sentí parte de la comunidad –

– Supongo que encontrará a las personas de por aquí muy similares a los que dejó -replicó el anciano. El extraño se despidió y alejó. El nieto lucía sorprendido por el ocasional diálogo, pero no dijo nada.

Pocas horas después, otro automóvil se detuvo frente a la granja donde aún los dos disfrutaban del atardecer otoñal. La conductora, con una gran sonrisa en su rostro, caminó con paso vivo hacia ellos y preguntó la forma de llegar al mismo pueblo; después de anotar con cuidado las instrucciones, también preguntó: – Dígame, ¿Cómo son las personas de por aquí?-. Una vez más, el anciano granjero cuestionó: – ¿Por qué lo pregunta?-. – Me estoy mudando desde uno de los pueblos más agradables que haya conocido -respondió la mujer con una gran sonrisa- Esos vecinos fueron unos verdaderos hermanos. Los extrañaré mucho -.

-Bueno – dijo el anciano- de seguro usted encontrará que los personas de por aquí son muy similares a los que dejó-. La mujer, muy contenta con la respuesta, se alejó feliz en su automóvil. El muchacho, muy sorprendido y algo confundido, se volvió hacia su abuelo y le inquirió:Abuelo, ¿por qué le diste a ambos forasteros respuestas opuestas a la misma pregunta?-.

El abuelo puso la mano sobre el hombro de su nieto, y como quien le revela una gran enseñanza sobre la vida, le respondió: –

Nunca olvides que es la actitud de una persona hacia su comunidad la que determina como ésta le responderá. La manera como la veamos no es más que el reflejo de nuestras propias actitudes.

Colaboración de Marta Zaghini ( 2001 )

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¡ Eh !

¡Eh! Sonríe… mas no te escondas detrás de esa sonrisa…

muestra aquello que eres, sin miedo.

Existen personas que sueñan con tu sonrisa, así como yo.

¡Vive! ¡Intenta! La vida no pasa de una tentativa.

¡Ama! Ama por encima de todo, ama a todo y a todos.

No cierres los ojos a la suciedad del mundo, no ignores el hambre!

Olvida la bomba, pero antes haz algo para combatirla,

aunque no te sientas capaz.

¡Busca! Busca lo que hay de bueno en todo y todos.

No hagas de los defectos una distancia, y sí, una aproximación.

¡Acepta! La vida, las personas, haz de ellas tu razón de vivir.

¡Entiende! A las personas que piensan diferente a ti, no las repruebes.

¡Eh! Mira… mira a tu espalda, cuantos amigos…

¿Ya hiciste a alguien feliz hoy? ¿O hiciste sufrir a alguien con tu egoísmo?

¡Eh! No corras… ¿Para que tanta prisa? Corre apenas dentro tuyo.

¡Sueña! Pero no perjudiques a nadie y no transformes tu sueño en fuga.

¡Cree! ¡Espera! Siempre habrá una salida, siempre brillará una estrella.

¡Llora! ¡Lucha! Haz aquello que te gusta, siente lo que hay dentro de tí.

¡Eh! Oye… escucha lo que las otras personas tienen que decir, es importante.

¡Eh! Sube… haz de los obstáculos escalones para aquello que quieres alcanzar.

Mas no te olvides de aquellos que no consiguieron subir en la escalera de la vida.

¡Eh! ¡Descubre! Descubre aquello que es bueno dentro tuyo.

Procura por encima de todo ser gente, yo también voy a intentar.

¡Eh! Tú… ahora ve en paz. Yo preciso decirte que…

¡¡¡¡Te adoro!!!! ¡¡¡¡Simplemente porque existes.!!!!

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Paz Mundial – Podemos hacer algo

Querido amigo (o amigo de amigo),

Ante determinados hechos parece que nada podemos hacer.

No es así ! Aunque parezca pequeño nuestro aporte, sí se puede hacer algo.

Hoy te propongo pedir por la paz rezando la siguiente Oración por la Paz (individual o con tu familia)

Oración por la Paz

Señor de la Paz

Tu que has creado a los hombres

objeto de Tu benevolencia.

Nosotros te bendecimos y te damos las gracias

por los esfuerzos que Tu espíritu de paz ha logrado:

que el odio se convierta en amor,

la desconfianza en comprensión

y la indiferencia en solidaridad.

Abre aun más nuestros espíritus y nuestros corazones

a las necesidades y al amor de nuestros hermanos,

para que seamos los constructores de la paz.

Que Tu reino de justicia llegue a los hombres de toda raza y toda

lengua.

Que la paz y el amor se extiendan sobre la Tierra.

Que así sea.

Queridos Hermanos en Cristo

Que nuestras oraciones, lleven a la reflexión de los gobernantes de la potencias mundiales, que no DESATEN otra guerra, en la que solo los civiles ajenos a las políticas son las víctimas. Oremos por los muertos en el crimen de Estados Unidos, y que el agredido, no sume con la VENGANZA, mas violencia a este bárbaro hecho.

Invita a tus amigos y vecinos, de otras confesiones religiosas, para que sumemos las plegarias de todos los HOMBRES DEL MUNDO, «QUE TODOS SOMOS HIJOS DE DIOS.

Los eventos producidos en Estados Unidos no son mas que la pauta de que como Seres Humanos nos falta mucho camino por recorrer en la escala de la Evolución. Debido a la cantidad de gente que, inocente o no, ha dejado este plano de existencia bajo estas circunstancias, no podemos pedir mas que cada uno en su idioma, con su credo correspondiente y su forma de orar particular, eleve una oración en nombre de estas personas que hoy sufrieron esta tragedia.

En este momento es importante que cada uno como Ser Humano, eleve una oración pidiendo:

QUE LA PAZ PREVALEZCA EN LA TIERRA.

Este momento es muy importante para todo el planeta. Es muy importante para que nos unamos a través de la oración y entre todos podamos crear una energía suficientemente fuerte como para que la Paz reine. No importa de que religión seas, ni como lo hagas. Solo te pedimos una oración o al menos un pensamiento de PAZ.

Por favor, pasa este email a todos los conocidos; cuantas más personas lo hagamos, mayor será la posibilidad de vivir en paz en nuestro planeta. GRACIAS A TODOS.

LOS QUE DESINTERESADAMENTE PASEN ESTE MAIL. Por favor para pasar el mail, borren todas las direcciones que lo anteceden y envíenlo lo mas limpio posible.

Gracias QUE LA PAZ PREVALEZCA EN en nuestro planeta TIERRA

Por hoy, solo un granito de arena por la paz en el mundo,

Un abrazo de Martín Urdániz ( 2001 )

Colaboración de Cristina Minolli ( 2001 )

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Nunca dejemos de soñar

Hubo un momento en el que creías que la tristeza sería eterna;

Pero volviste a sorprenderte a ti mismo riendo sin parar.

Hubo un momento en el que dejaste de creer en el amor;

Y luego apareció esa persona y no pudiste dejar de amarla cada día más.

Hubo un momento en el que la amistad parecía no existir;

Y conociste a ese amigo que te hizo reír y llorar,

en los mejores y en los peores momentos.

Hubo un momento en el que estabas seguro

que la comunicación con alguien se había perdido;

Y fue luego cuando el cartero visitó el buzón de tu casa.

Hubo un momento en el que una pelea prometía ser eterna;

Y sin dejarte ni siquiera entristecerte terminó en un abrazo.

Hubo un momento en que un examen parecía imposible de pasar;

Y hoy es un examen más que aprobaste en tu carrera.

Hubo un momento en el que dudaste de encontrar un buen trabajo;

Y hoy puedes darte el lujo de ahorrar para el futuro.

Hubo un momento en el que sentiste que no podrías hacer algo:

Y hoy te sorprendes a ti mismo haciéndolo.

Hubo un momento en el que creíste que nadie podía comprenderte;

Y te quedaste boquiabierto mientras alguien parecía leer tu corazón.

Así como hubo momentos en que la vida cambió en un instante, nunca olvides

que aún habrá momentos en que lo imposible se tornará un sueño hecho realidad.

Nunca dejes de soñar,

porque soñar es el principio de un sueño hecho realidad.

Colaboración de Clementina Uncal ( 2001 )

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Tómate tiempo

Tómate tiempo para pensar,

es la fuente de poder.

Tómate tiempo para rezar,

es el mayor poder sobre la tierra.

Tómate tiempo para reír,

es la música del alma.

Tómate tiempo para jugar,

es el secreto de la perpetua juventud.

Tómate tiempo para amar y ser amado,

es el privilegio que nos da Dios.

Tómate tiempo para dar,

el día es demasiado corto para ser egoísta.

Tómate tiempo para leer,

es la fuente de la sabiduría.

Tómate tiempo para ser amable,

es el camino de la felicidad.

Tómate tiempo para trabajar,

es el precio del éxito.

Tómate tiempo para hacer caridad,

es la llave del cielo.

Extraído del libro Madre Teresa de Calcuta, camino de sencillez

de Editorial Planeta

Colaboración de Gabriela Serrano Agüero

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Quisiera compartir contigo…

Amigo :

tu propia muerte te asusta, y la muerte de tus seres queridos te duele.

No voy a escribir una sola palabra para superar tu miedo o suprimir tu dolor,

porque no tengo esa palabra mágica. Tu verás cómo enfrentar tu propia muerte.

Yo sólo quisiera compartir contigo algunas cosas simples,

para que te duelas sanamente y hagas tu dolor más llevadero,

ante la muerte de los tuyos. Y eso es todo.

Que te duelas, dije, sanamente, a causa de tus muertos,

que te deprimas un tanto y un tiempo, pero no que no puedas vivir,

que te dejes morir porque murió tu madre, tu padre o tu hermano,

tu esposo o tu esposa, tu hijo o tu amigo…

Yo quisiera ayudarte, si me es posible y si tú quieres,

a que sufras sanamente, para seguir viviendo;

porque he visto a muchos MORIRSE CON SUS MUERTOS.

Tus muertos ya murieron, y en tu mente ya lo sabes.

Pero tu corazón necesita tiempo para saber y aceptar que ya partieron.

Por eso tu dolor resurge como nuevo, ante esa mesa familiar

donde un lugar quedó vacío, en esa Navidad donde alguien falta,

en ese nacimiento sin abuelo, en ese año nuevo en que se brinda

y alguien ya no levanta la copa…

Así es el corazón humano:

siempre vive de a poco lo que la razón sabe de golpe.

¡Para la mente los muertos mueren una vez; para el corazón mueren muchas veces!

Extraído del libro No te mueras con tus muertos

de René Juan Trossero – Editorial Bonum

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