El Duelo y su elaboración – Sanación

Sanación

1. Cuida tu mente y tu corazón. Si están en sufrimiento sánalos. De ellos brotan las fuentes de la vida.

2. Las heridas de fuera deben cicatrizar; las de dentro, también.

3. Como el Ave Fénix: hay que resurgir desde el sufrimiento.

4. Sanar el sufrimiento: sanear la persona.

5. No hay crecimiento personal sin manejo constructivo de los duelos.

6. Remediar el sufrimiento sólo con medicamentos es un mal remedio.

7. Es intranquilizante que se usen tranquilizantes para elaborar el duelo.

8. Nadie se cura por fuera si no se sana por dentro.

9. Nada sienta mejor al cuerpo que el crecimiento del espíritu.

10. La vida tiene sentido. Pero hay que darle sentido a la vida.

11. Cuando tú mismo te conviertes en otro hombre, el sufrimiento realmente tiene sentido.

12. Después de un gran sufrimiento no volvemos a ser los mismos de antes, para mejor… o para peor.

13. El duelo es un proceso complejo y continuo de liberación interior.

14. No con-vertirse en sufrimiento; re-convertirse en el sufrimiento.

15. Si el sufrimiento te re-pierde, el duelo te re-encuentra.

16. El hombre es el mejor remedio para el hombre.

17. No se puede vivir sin sufrir. Pero no hay que vivir para sufrir.

18. No se puede vivir sin separarse. Pero en el sufrimiento no hay que separarse, hay que unirse más.

19. No se puede vivir sin abrirse a los demás. Pero abrirse de los demás trae sufrimiento.

20. La sanación de una persona está ligada a su capacidad de manejar de manera constructiva las pérdidas de la vida .

21. Habrá verdadera liberación del sufrimiento cuando vayamos al fondo de las cosas, de nosotros, de Dios.

22. El tiempo no sana. Sana lo que se hace con el tiempo.

23. En el duelo hay que sanar el porqué, el cómo, el con quién y el para qué del sufrimiento.

24. Si el sufrimiento pesa tanto en nosotros es que somos víctimas de una gran ceguera de la vida, del amor, de la fe…

25. No hay comprensión de la crisis sin autocomprensión de la propia persona.

26. Para sanar: comunidad, comunicación y comunión solidaria.

27. En los duelos hay que hacer cirugía de sanación con el bisturí de los valores y de la fe…

28. Que el sufrimiento le gane al duelo algunas guerras; que el duelo le gane al sufrimiento la batalla de la sanación.

29. Es más doloroso no asumir positivamente el sufrimiento que elaborarlo .

30. Reconocerse para reestructurarse.

31. Tras el sufrimiento, hay que des-aprender para aprender y sanar.

32. Evitando ser prisionero de los propios esquemas mentales, se sana.

33. La elaboración del duelo da sabiduría de vida.

34. Si no elaboras tu duelo, la causa de todas tus desgracias será tu ser querido muerto.

35. Cuando tú mismo te conviertes en otro hombre, realmente le sacas sentido al sufrimiento.

36. El duelo no es sólo para transformar el sufrimiento, sino para transformarse desde el sufrimiento.

37. El duelo sano purifica la fe insana. La fe sana purifica el sufrimiento insano.

38. Los duelos para sanarlos hay que orarlos.

39. El duelo busca el secreto de la sanación recreando el sentido de la vida y en quien dijo: Yo soy la Resurrección y la Vida (Juan 11,25).

40. Una verdad sumamente confrontante pero sanante: Ni siquiera un hijo es el sentido último de la vida de los padres.

41. Que no encuentres a tu sufrimiento sentido, no quiere decir que te quedes tú sin sentido.

42. En el duelo sano se sanan los amores insanos.

43. La sanación del duelo des-ego-iza.

44. La herida de un gran amor sólo se sana con un mayor amor.

45. San Juan de la Cruz: El más puro padecer trae y acarrea más puro entender.

46. Si curas la herida de tu hermano, el Señor cicatrizará la tuya (Isaías 58,8).

47. Resurrección es un grupo de mutua ayuda para elaborar los duelos. Su lema: El secreto de la muerte búscalo en la Vida.

48. Jesús, proveedor de salud con su gracia, sana contigo tus sufrimientos.

49. La Virgen María, a quien le mataron a su único hijo, ¿fue feliz el resto de su vida?
Sí, porque vivió como madre la resurrección de su Hijo.

50. En tus sufrimientos: canta y camina (San Agustín).

51. Señor, que no sea tan egoísta de no querer crecer desde mis sufrimientos.

52. No digas a tus muertos adiós. Di a tus muertos: a-Dios.

53. La espiritualidad no tapa el sufrimiento. Quiere develarlo y desvelarlo.

54. Cuando desaparezca el sufrimiento transformado, dejará como herencia el secreto de la vida.

55. Algo que parecía imposible: Yo sé que mi ser querido muerto me quiere feliz.

 

Tomado del Sitio Web   www.redsanar.org / pastoralduelo

Pastoral del Duelo                 www.pastoralduelo.com

Publicado por

Javier Serrano

Arquitecto, Productor de Seguros y Agente Inmobiliario apasionado por los deportes y Cronista, Camarógrafo y Fotógrafo Amateur

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