Metodología de sanación
Cuida tu mente y tu corazón.
Si está en sufrimiento, sánalos.
De ellos, brotan las fuentes de la vida.
1* Lo que no se asume, no se redime. El duelo no es pasividad. Nadie me cura por fuera si yo no me saneo por dentro.
2* El duelo lo hago desde mi «pena de la separación», no desde quien se murió. Yo soy el objeto y el sujeto de mi duelo.
3* Al amor infectado de apegos he de purificarlo para querer en verdad y libertad, a quien se murió, a los otros y a mí mismo.
4* Tengo que redimir el concepto insano de sufrimiento para no hacerme víctima ni victimario.
5* Mi ser querido muerto «no me arruinó mi existencia con su muerte». Mi ceguera ante la verdad de la vida y la muerte me hacen infeliz.
6* El duelo es una invitación a la reconstrucción de mi persona a vivir con hondura un proyecto vital ante mí, ante los hombres y ante Dios.
Tomado del Sitio Web www.redsanar.org / pastoralduelo
Pastoral del Duelo www.pastoralduelo.com