Cristo Rey

¿Dónde está el reinado de Jesús? ¿En qué consiste su propuesta?

Quisiera para esto recordar unas palabras que Jesús dirige a sus discípulos durante la última cena en el evangelio de Lucas: “Los jefes de las naciones ejercen su dominio sobre ellas y los que tienen autoridad reciben el nombre de benefactores. Pero ustedes no procedan de esta manera. Entre ustedes, el más importante sea como el menor, y el que manda como el que sirve… Yo estoy entre ustedes como el que sirve”.

Creo que esto nos podría ayudar a comprender su condición de rey. La victoria de Jesús en la cruz no consiste en vencer militarmente o imponer religiosamente sus ideas, pues esto sólo provocaría otra estructura de poder alterna. Jesús vence asumiendo con radicalidad su mensaje y aceptando hasta su muerte las consecuencias que éste le trajera.

Él anunció la llegada del Reino, y pasó sirviendo a los más necesitados y enfrentando a las autoridades por sus incoherencias. Sin embargo, Él no podía “forzar u obligar” a los demás para que aceptaran este Reino, pero sí podía asumir las consecuencias de este anuncio, las cuales significaron su muerte.

Jesús renuncia a reinar desde el poder, como siempre lo habían hecho tanto judíos como romanos, a pesar de que esto pueda significarle el aparente fracaso de su anuncio. Por esta opción, es que reconocemos que el Padre irrumpe en la historia del hombre; resucitando a Jesús lo proclama verdadero vencedor.

Es decir, la propuesta de Jesús de reinar desde la libertad, desde el respeto, desde el servicio, es coronada por el Padre a través de la Resurrección. Este es el reinado de Jesús, un reinado que se construye con coraje, con entrega, con determinación, pero que renuncia a ser impuesto a los demás por el poder y la violencia, ya sea religioso, cultural, político o militar.

El reino de Jesús es la oferta divina a vivir en libertad y responsabilidad, respondiendo a los más profundos anhelos que posee el hombre: la unidad personal, comunitaria y divina; y encontrando en este proceso a Dios Trino que es el impulsor y modelo de tal unidad.

ACTUALIDAD

¿Cuántas veces como iglesia hemos querido “imponer” nuestro mensaje como “el

verdadero y único”, a partir de las estructuras de poder (moral, político, cultural, ¡militar!)? ¿Será lo más apegado al mensaje de Jesús? Nuestra proclamación de Jesús como nuestro rey, nos debería llevar al respeto del otro, a la tolerancia, a la unidad en las diversidad; aceptando la decisión del otro tal como Jesús lo hizo, aunque esto nos lleve a la cruz, o a un aparente fracaso.

¿Quiénes son nuestros reyes en la actualidad? ¿La eficiencia, la democracia, la estabilidad económica, la tecnología? Ninguna de estas realidades es mala, al revés pueden hacer mucho bien, pero cuando éstas quieren ser impuestas a los demás, o a un pueblo entero, por la vía del poder y la coerción, se están pisando los derechos más elementales del hombre que son los derechos a la libertad y a la autodeterminación.

¿Qué otros reyes tenemos hoy? El placer, lo fácil, la posición económica, la imagen ante los demás, el trabajo? ¿A quién seguimos? ¿Desde dónde situamos nuestra escala de valores? Jesús quiere ser nuestro rey, pero no bajo la amenaza de nuestra condena, o nuestra infelicidad, sino que busca reinar en nosotros cuando aceptemos vivir desde el amor, desde el respeto, desde la libertad asumida y comprometida. Entonces podremos decir que hemos sido salvados por Jesús, tal como Jesús salvó a ese ladrón que se atrevió a no unirse a las críticas generalizadas contra Jesús y lo aceptó como rey y salvador.

PROPÓSITO

Busquemos estas semana cuestionar nuestra escala de valores y revisar si realmente está cimentada en el Evangelio de Jesucristo; si realmente la libertad, el amor, el servicio, el compromiso con nuestra autenticidad, la responsabilidad, el respeto y la aceptación del otro están como fundamento de nuestro proyecto de vida. Sólo desde el intento por vivir esto es que podremos proclamar a Jesús como nuestro rey.

Extraído del Portal Católico www.encuentra.com ( 2001 )

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Publicado por

Javier Serrano

Arquitecto, Productor de Seguros y Agente Inmobiliario apasionado por los deportes y Cronista, Camarógrafo y Fotógrafo Amateur

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