¿Quién es tu amigo?

Tu amigo es:

El que siendo leal y sincero te comprende.

El que te acepta como eres y tiene fe en ti.

El que sin envidia reconoce tus valores, te estimula y elogia sin adularte.

El que te ayuda desinteresadamente y no abusa de tu bondad.

El que con sabios consejos te ayuda a construir y pulir tu personalidad.

El que goza con las alegrías que llegan a tu corazón.

El que sin penetrar en tu intimidad, trata de conocer tu dificultad, para ayudarte.

El que sin herirte te aclara lo que entendiste mal o te saca del error.

El que levanta tu ánimo cuando estás caído.

El que con cuidados y atenciones quiere menguar el dolor de tu enfermedad.

El que te perdona con generosidad, olvidando tu ofensa.

El que ve en tí un ser humano con alegrías, esperanzas, debilidades y luchas…

Este es el amigo verdadero.

Si lo descubres, consérvalo como un gran tesoro.

El amigo que nunca falla es Dios.

Si aún no lo encuentras, aquí tienes a un amigo.

 

Envío: Edwin Valdés (edwinvaldes@yahoo.com)

 

Extraído de Valores del Portal Católico www.encuentra.com

 

Colaboración de Pablo Deluca

 

Dialogar

Cuando discutimos tratamos de vencer.
            Cuando dialogamos tratamos de llegar juntos.
            Cuando discutimos escuchamos para contraargumentar.
            Cuando dialogamos escuchamos para comprender.
            Cuando discutimos estamos “enfrentados con” alguien.
            Cuando dialogamos estamos “con” alguien.
            Cuando discutimos estamos tensos en alguna medida.
            Cuando dialogamos estamos distendidos.
            Cuando discutimos nos amenaza y nos impulsa el temor de perder.
            Cuando dialogamos nos afianza y alienta la intención de convivir.
Cuando discutimos en realidad solo podemos escucharnos a nosotros mismos porque permanecemos solos ...interiormente solos.
            Cuando dialogamos es posible escuchar al otro...porque estamos con él.
            Cuando discutimos empleamos un lenguaje que al otro
            no le es fácil ni agradable receptar.
            Cuando dialogamos buscamos las palabras adecuadas
            para decir y para ser escuchados.
            Cuando discutimos nos delata en cualquier momento
            el tono de nuestra alma: nuestra voz...un gesto...la mirada.
            Cuando dialogamos cada palabra lleva una carga de amistad
            y de lealtad que son inconfundibles.
            Cuando discutimos miramos con dificultad a los ojos.
            Son miradas distantes, duras o hirientes.
            Cuando dialogamos la mirada nos acerca y nos comunica.
            Con palabras o en silencio.
            Cuando discutimos el silencio nos genera ansiedad.
            Puede ser entendido como carencia de argumentos, o desprecio.
            Cuando dialogamos el silencio nos acerca.
            Es un acto de respeto mutuo. Es tiempo de escucha, o de éxtasis.
            Cuando discutimos queremos lograr el silencio del otro. Acallarlo.
            Cuando dialogamos le ofrecemos el nuestro.
            Nos interesa escuchar su palabra.
            Cuando discutimos levantamos fácilmente un trono para la corona.
            Cuando dialogamos tendemos una mesa para todos.
            Cuando discutimos el ritmo se hace agitado, o tenso.
            Cuando dialogamos se percibe la paz.
            Cuando discutimos nos sentimos poco deseosos de permanecer juntos.
            Cuando dialogamos nos sucede exactamente lo contrario. Estamos bien.
            Cuando discutimos cavamos dos trincheras.
            Cuando dialogamos construimos un hogar.
            Cuando discutimos buscamos deliberada
            o inconscientemente cambiar al otro.
            Cuando dialogamos lo estamos aceptando...
            y le estamos haciendo posible el cambio  ¡El cambio posible!
            No siempre es posible dialogar.
            A veces las defensas son demasiado rígidas.
            O las estructuras demasiado débiles.
            Extraído de Sugerencias para el diálogo educativo
            Dr. Julio César Labaké  -  Editorial Bonum
Colaboración de Pablo Deluca   ( año 2.002 )

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No pares…continúa tocando

Deseando dar ánimo al progreso de su joven hijo al piano, una madre lleva a su pequeño hijo, a un concierto de Paderewski.

Después de sentarse, la madre vio a una amiga en la platea y fue hacia ella para saludarla. Tomando la oportunidad para explorar las maravillas del teatro, el pequeño niño se levanta y eventualmente sus exploraciones lo llevaron a una puerta donde estaba escrito «PROHIBIDA LA ENTRADA».

Cuando las luces bajaron y el concierto estaba a punto de empezar, la madre regresa a su lugar y descubrió que su hijo no estaba allí.

De repente, las cortinas se abrieron y las luces cayeron sobre un impresionante piano Steinway en el centro del palco. Horrorizada, la madre vio a su hijo sentado al teclado, inocentemente tocando las notas de …. «Mambrú se fue a la guerra».

En aquel momento, el gran maestro de piano hizo su entrada, rápidamente fue al piano y susurró al oído del niño, «no pares, continúa tocando».

Entonces apoyado, Paderewski extendió su mano izquierda y empezó a llenar la parte del bajo, luego, puso su mano derecha alrededor del niño y agregó un bello arreglo de melodía. Juntos, el viejo maestro y el joven aprendiz, transformaron una situación embarazosa, en una situación maravillosamente reactiva. El público estaba perplejo. Así son las cosas con Dios.

Lo que podemos conseguir por cuenta propia, lo hacemos lo mejor posible y los resultados no son exactamente como una música graciosamente fluida. Pero, con las manos del Maestro, las obras de nuestras vidas verdaderamente pueden ser lindas.

La próxima vez que te determines a realizar cualquier hecho, (sin cruzar puertas donde diga: “PROHIBIDA LA ENTRADA”) escucha atentamente. Puedes oír la voz del Maestro, susurrando en tu oído, «no pares, continua tocando».

Siente sus brazos amorosos a tu alrededor. Siente que sus fuertes manos están tocando el concierto de tu vida.

Recuerda, Dios no llama a aquellos que son capacitados. Él capacita a aquellos que son llamados. Y Él siempre está para amarte y guiarte a grandes cosas.

Que alguien como el Maestro toque mi vida, es un privilegio, tocar la vida de alguien es un honor, pero el ayudar a que otros toquen sus propias vidas, es un placer indescriptible!

Algunas veces en la vida, tú encuentras un amigo especial; alguien que cambia tu vida sólo por ser parte de ella, alguien que te hace remar sin parar, alguien que tú piensas que es realmente bueno, alguien que te querrá a pesar de todo, alguien que siempre estará a tu lado a pesar de que ya no exista en tu vida, alguien que te convence que de verdad hay una puerta cerrada esperando que tú la abras; pero casi siempre lo alejas de ti y cuanto te das cuenta de ello, algunas veces ya es demasiado tarde para arrepentirte, así que cuanto encuentres a alguien así, no lo desaproveches.

(Versión retocada en algunos puntos, para mayor comprensión: Fuente modificada de: C.Vaillant-Yanes ROMANS 8:37-39)

 
Colaboración de Pablo Deluca  ( año 2.002 )

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Preparemos nuestro corazón para la Navidad

Este escrito adjunto, surgió de mi corazón a las 8:00 hs de la mañana de hoy. (30/11/01) Me preparé un cafecito, me senté frente a la notebook y dejé que mis dedos empezaran a escribir.

Aquí va…espero que les sirva para uds. y/o a sus familiares y amigos.

Pueden adaptarlo, corregirlo, mejorarlo, completarlo, …en fin lo que les parezca, lo importante es que nos haga reflexionar y que llegue donde tenga que llegar para que esta Navidad estemos bien preparados.

Los saluda cordialmente.

Pablo Deluca

 

 

Preparemos nuestro corazón para recibir a Jesús en esta Navidad.

Siempre escuché: “…pidamos que Jesús nazca en nuestros corazones”, pero meditando un poco, eso será posible si primero renovamos nuestro corazón. Jesús nació en un portal de Belén y sobre un pesebre.

Nuestro corazón podrá recibir con plenitud a Jesús cuando sea :

  • Primeramente un corazón simple, sencillo.
  • Un corazón que se deje moldear por Su Madre María para prepararlo con la forma de Su Hijo.
  • Un corazón con paz para recibir al Rey de la Paz.
  • Un corazón atento a las cosas de Dios, para poder estar preparado para recibir tan importante visita.
  • Un corazón humilde.
  • Un corazón sin tinieblas ya que será testigo de la Luz.
  • Un corazón que ame de verdad y ame la verdad.
  • Un corazón justo.
  • Un corazón puro.
  • etc.,etc., etc.

Si sentís que tu corazón es complicado, no es dócil, no tiene mucha paz; que está más en las cosas del mundo que en las de Dios, que está lleno de soberbia, que está lleno de tinieblas como la injusticia y la impureza, corre a reconciliarte con Dios de corazón, contale al cura en confesión todas estas características de tu corazón ya que él tiene el quita manchas más efectivo que exista en esta tierra, que es el misericordioso perdón de Dios, que limpia al que se deja limpiar, que purifica y borra tinieblas en el acto mismo del arrepentimiento, que derrota toda soberbia, toda injusticia y toda impureza. El perdón de Dios libera nuestras cargas y como consecuencia trae la paz a nuestro corazón. Así estaremos preparados para recibir, cada día a Jesús en la Eucaristía y especialmente en este tiempo de adviento que empezamos a vivir, para que al llegar el cumpleaños de Jesús, en esta nueva Navidad, tengamos preparado nuestro corazón como un pequeño y humilde pesebre, pero lleno del calor del Amor de Dios recibido al momento de dos sacramentos importantísimos como lo son la Reconciliación y la Comunión.

Que Dios nos de la gracia de pasar este adviento en oración y logrando cada día la conversión de nuestros corazones, para llegar a ser testigos de la Luz y así salir en misión a iluminar con nuestro ejemplo a los demás.

Con mucho cariño para todos ustedes.

Pablo Deluca

Viernes 30 de noviembre de 2001

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Ver mas allá

El dueño de una tienda estaba colocando un anuncio en la puerta que  decía: "Cachorritos en venta".
Esa clase de anuncios siempre atraen a los niños, y pronto un niñito apareció en la tienda preguntando: "¿Cuál es el precio de los perritos?"
El dueño contestó: "Entre $30 y $50". El niñito metió  la mano en su bolsillo y sacó unas monedas: "Sólo tengo $2.37... ¿puedo verlos?".
El hombre sonrió y silbó. De la trastienda salió su perra corriendo seguida por cinco perritos. Uno de los perritos estaba quedándose considerablemente atrás. El niñito inmediatamente señaló al perrito rezagado que cojeaba.
"¿Qué le pasa a ése perrito?", preguntó.
El hombre le explicó que cuando el perrito nació, el veterinario le dijo que tenía una cadera defectuosa y que cojearía por el resto de su vida.
El niñito se emocionó mucho y exclamó: "¡Ese es el perrito que yo quiero comprar!". Y el hombre le explicó: "No, tú no vas a comprar ese cachorro, si tú realmente lo quieres, yo te lo regalo". Y el niñito se disgustó y mirando directo a los ojos del hombre le dijo: "Yo no quiero que usted me lo regale. El vale el precio completo. De hecho, le voy a dar mis $2.37 ahora y 50 centavos cada mes hasta que lo haya pagado completo".
El hombre contestó: "Tú en verdad no querrás comprar ese perrito, hijo. El nunca será capaz de correr, saltar y jugar como los otros perritos".
El niñito se agachó y se levantó la pierna de su pantalón para mostrar su pierna izquierda, cruelmente retorcida e inutilizada, soportada por un gran aparato de metal. Miró de nuevo al hombre y le dijo: "Bueno, yo no puedo correr muy bien tampoco, y el perrito necesitará a alguien que lo entienda".
El hombre estaba ahora mordiéndose el labio, y sus ojos se llenaron de lágrimas... sonrió y dijo: "Hijo, sólo espero y rezo para que cada uno de estos cachorritos tenga un dueño como tú".
En la vida no importa quién eres, sino que alguien te aprecie por lo que eres, te acepte y te ame incondicionalmente. Un verdadero amigo es aquél que llega cuando el resto del mundo se ha ido.

Colaboración de Pablo Deluca ( 2001 )

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Aumentar nuestra fe

Éste texto lo envié a mi cadena de mails de F.E. y FE el 9 de Noviembre del año 2.001 en vísperas de mi Confirmación a los 41 años de edad.

Javier Serrano Agüero

24 de Abril 2.010

«Quiero compartir con todos una gran alegría que estoy viviendo. El próximo domingo, junto a un grupo de adultos, voy a confirmar mi compromiso cristiano por medio del sacramento de la Confirmación.

Para los que no conocen mucho de mí, les cuento que tengo 41 años y que recién en los últimos cinco años he reincorporado a Jesús en mi vida. Sucedió a partir de un par de fuertes sacudones. Mi gran amigo Pablo me acercó a la Virgen María, y ella sintiendo que mi alma se entregaba, me abrió el corazón a Jesús una mañana en la Iglesia de Flores antes de iniciar la peregrinación a Luján.

Desde esos días de 1996 mi vida ha cambiado y no tengo más que dar gracias a Dios por convertir mi corazón. A principios de este año decidí iniciar mi preparación en la Iglesia del Socorro para encarar y cumplir este compromiso que sentía pendiente en mi interior. Como agradecimiento y para unir aún más nuestros vínculos en la fe compartida, he elegido a Pablo Deluca como padrino.

Todo empezó a partir de que este gran amigo estuvo cerca de mí en momentos difíciles para toda mi familia y me hizo ver una luz; desde el momento que empecé a hablarle a Dios en la oración y a prestarle más atención, todo cambió. Poco a poco fui creciendo en la fe, la cual hoy me brinda una gran paz de espíritu.

Hoy quiero compartir mi felicidad para alentar a los que aún se encuentran un poco fríos en su acercamiento a Dios. Los invito a jugarse, a comprometerse en la relación con Jesús, a abrirse e interesarse más plenamente en sus enseñanzas, sus promesas y en su ejemplo. De la mano de la Virgen María todo es más fácil. Pidan su ayuda en sus oraciones.»

El siguiente texto extraído del Portal católico www.encuentra.com ( 2001 )complementa mi testimonio de hoy :

…Los apóstoles se manifiestan al Señor con toda sencillez. Conocen su fe insuficiente en muchos casos ante lo que ven y lo que oyen, y un día le piden a Jesús : ¡ Auméntanos la fe ! También nosotros nos encontramos como los Apóstoles; nos falta fe ante la carencia de medios, ante las dificultades en el apostolado, ante los acontecimientos que nos cuesta interpretar desde un punto de vista sobrenatural. Pero si vivimos con la mirada puesta en Dios no hemos de temer nada. Imitemos a los Apóstoles y con ánimo humilde pidamos al Señor : ¡ Auméntanos la fe ! La fe es el tesoro más grande que tenemos, y por eso hemos de poner todos los medios a nuestro alcance para conservarla y acrecentarla

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El Papa Juan Pablo II, profeta de nuestros tiempos

Padre Jordi Rivero

El Papa Juan Pablo II es la figura central de la tercera parte del secreto de Fátima. Es también el hombre escogido por la Virgen en este tiempo crítico de la historia: El Papa sin duda influyó mucho en la caída del imperio Soviético, ha llevando el Evangelio al mundo entero, ha guiado a la Iglesia con extraordinaria sabiduría hacia el III milenio. Ante la crisis actual, el Papa es la voz mas poderosa por la paz.

Podemos detener los males con la oración. En el secreto de Fátima el Papa muere mártir. Entonces, ¿cómo dice el Vaticano que se refiere al atentado del `81? Porque en ese atentado el Papa debería haber muerto. Nadie ha sobrevivido ese tipo de balas atravesando su cuerpo. El Papa reconoció que había sido un milagro de la Virgen. Las profecías nos advierten de peligros pero están condicionadas a nuestras oraciones. El Papa el 13 de Mayo del 2000, desde la misa de Fátima para la beatificación de los pastorcitos, agradeció a Jacinta por haber ofrecido los inmensos dolores de su enfermedad por el Papa del secreto. ¡Esta pequeña niña salvó, con sus intensas oraciones y sacrificios, la vida del Papa que todavía no había nacido! Nosotros, con nuestras oraciones, podemos detener los males que azotan a la humanidad. Recordemos que la raíz del mal es el pecado. Se vence con la oración, la penitencia y la conversión.

El Papa entre los musulmanes. Justo en el momento preciso, unos días después de la tragedia de EEUU, La Divina Providencia dispuso que el Papa visitase a Kazjastán, llegando a estar a solo 200 millas de Afganistán. Al Papa le recomendaron que cancelase, pero él sabía que su misión era de gran trascendencia. Por primera vez una multitud de mas de 50,000, en su gran mayoría islámica, escuchó el Evangelio. Tan lleno del Espíritu habló el Papa que no puede dudarse que sus palabras plantaron semillas en los corazones.

Recordemos que Kazjastán era uno de los destinos de las deportaciones estalinistas. Cientos de miles fueron enviados sólo en 1936. Allí está el Gulag, inmortalizado en la novela de Alexander Solzjenitsin, lugar que simboliza la mayor crueldad del hombre pero también su mayor grandeza al padecer el sufrimiento y martirio por Cristo.

Los tiempos han cambiado. Nazarbayevel, ex lider comunista, ahora presidente de Kazjastán, dijo ante el Papa: «Musulmanes y cristianos deben crear una sociedad basada en el amor». El Papa es recibido con brazos abiertos y anuncia libremente a todos el camino del amor de Cristo. No podemos, hermanos, pasar por alto este milagro. Vemos que, en un mundo donde hay tantos males, ¡sobreabunda la gracia!

De los mensajes del Papa en Kazjastán

«Deseo dirigir un sincero llamamiento a todos, cristianos y pertenecientes a otras religiones, a trabajar juntos para construir un mundo sin violencia, un mundo que ama la vida y que avanza en la justicia y en la solidaridad».

El Papa nos enseñó que todos somos hijos del mismo Dios: «Desde este lugar, invito tanto a los cristianos como a los musulmanes a elevar una inmensa oración al único y omnipotente Dios, del que todos nosotros somos hijos, para que pueda reinar en el mundo el gran don de la paz» «Que todos los pueblos, apoyados por la divina sabiduría, puedan trabajar por doquier para construir una civilización del amor, en la que no haya lugar para el odio, la discriminación y la violencia»

«Cuando en una comunidad civil los ciudadanos saben aceptarse con sus respectivas convicciones religiosas, es más fácil afianzar entre ellos el reconocimiento efectivo de los demás derechos humanos y un entendimiento basado en los valores de fondo de una convivencia pacífica y constructiva».

No podemos olvidar a los que viven en Afganistán, Pakistán y otros países.
La población afgana ya se encontraba reducida a la miseria por largos años de guerra y por la tiranía de sus gobernantes. Ahora su condición llega al extremo. Huyen ante el peligro de una represalia de EEUU y quedan hacinados en campamentos de miseria donde no hay agua ni alimentos.

No podemos olvidar tampoco a la minoría cristiana en países como Pakistán (%3). Pensemos en el pánico que viven en estos momentos sabiendo que cualquier acción del occidente repercutirá en contra de ellos. Pensemos en los 24 presos (8 del extranjeros, 16 nativos) en Afganistán acusados de «proselitismo» (propagar el cristianismo).

Si guardamos todo esto en el corazón entenderemos por qué el Papa insiste en la urgencia de vivir el mensaje de Fátima: oración, penitencia, conversión.

 

Extraído del sitio www.corazones.org ( 2001 )

 

Colaboración de Pablo Deluca

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Buenos días…, buenas tardes…, buenas noches

Cuando te levantaste en la mañana, yo ya había preparado el sol para empezar tu día y el alimento para tu desayuno. Sí, preví todo eso, mientras vigilaba y guardaba tu sueño, tu familia, tu casa.
Esperé por tus “buenos días”, pero te olvidaste...
Bueno pensé, parecías tener tanta prisa, que te perdoné.
El sol apareció, las flores entregaron su perfume, la brisa de la mañana te acompañó, y tú no pensaste que yo había preparado todo eso para ti.
Tus familiares sonríen, tus colegas te saludan, trabajaste, viajaste, realizaste negocios, lograste victorias, pero...
No percibiste que yo estaba cooperando contigo, y más logros tendrías si me dieras una oportunidad... yo sé... corres tanto... te perdono.
Lees bastante, oyes muchas cosas, pero así y todo no tienes tiempo de leer o de oír mi palabra. Quise hablarte, pero no me diste tiempo, incluso quise aconsejarte, pero no pensaste en esa posibilidad.
Tu visión, tus pensamientos, tu hablar, serían mejores. Las cosas malas serían menores, y las buenas serían mucho mejores en tu vida.
La lluvia que cayó en la tarde fueron lágrimas por tu ingratitud, y también fueron mi bendición sobre la tierra, para que no te falte pan y agua.
Trabajaste, ganaste dinero, que no fue más porque no me dejas ayudarte.             Te olvidas que mi deseo es que participes en mi Reino, con tu vida, tu tiempo, tu trabajo y tu dinero.
Terminó tu día, vuelves a casa, mandé la luna y las estrellas para que la noche luciera más bonita y recordaras mi amor por ti.
Ciertamente ahora me vas a decir : “Buenas noches, gracias”... pero te dormiste... ¡¡¡ Qué pena !!!  Buenas noches, que duermas bien. Yo sigo velando por ti.
 
                                                 Jesús
 
 
Colaboración de Pablo Deluca, gran amigo y compañero de camino.
 
 

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