Himno a la caridad / amor

Aunque tuviera plenitud de fe

como para trasladar montañas,

si no tengo caridad, nada soy.

Aunque repartiera todos mis bienes,

y entregara mi cuerpo a las llamas,

si no tengo caridad, nada me aprovecha.

La caridad es paciente, es servicial;

la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa,

no es engreída; es decorosa;

no busca su interés; no se irrita;

no toma en cuenta el mal;

no se alegra de la injusticia;

se alegra con la verdad.

Todo lo excusa. Todo lo cree.

Todo lo espera. Todo lo soporta.

La caridad no acaba nunca.

1ra. Epístola de San Pablo a los Corintios ( Co 13 2-8 )

Que estas palabras te acompañen y te sirvan de guía hoy y siempre.

Te invitamos a compartir este texto y que lo envíes a quienes creas que lo puedan disfrutar o que les pueda ser de utilidad.

También nos encantaría recibir alguna reflexión, texto u oración que quieras compartir.

Publicado por

Javier Serrano

Arquitecto, Productor de Seguros y Agente Inmobiliario apasionado por los deportes y Cronista, Camarógrafo y Fotógrafo Amateur

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *